Cómo iluminar un dormitorio

Las habitaciones de nuestras casas cumplen muchas más funciones de lo que imaginamos. Saber cómo iluminar un dormitorio para sacarle mayores beneficios a nuestra estancia es una cuestión de suma importancia. No solo se trata de un ambiente para dormir, sino que podemos utilizarlo para muchas otras actividades provechosas.

¿Cómo se debe iluminar un dormitorio?

Las habitaciones para dormir requieren de armonía para que podamos relajarnos y descansar correctamente. Por eso, las lámparas y bombillas que coloquemos deben presentar una iluminación uniforme, homogénea y sin sombras. Elegir productos de luminaria cálida y no muy potente nos dará esa sensación de agrado que tanto se necesita a la hora de conciliar el sueño.

Además, al tratarse de una zona que suele estar a oscuras durante muchas horas, tanto de día como de noche, es conveniente disponerla para el ahorro energético. En este sentido, los productos LED suelen ser una buena alternativa.

¿Qué tipo de lámpara poner en el dormitorio?

Cuando se trata de volver un ambiente funcional, es conveniente detectar los puntos donde centraremos las actividades principales.

Las más usuales son las lámparas de techo, los plafones y las luces bajas (downlight). Si elegimos artefactos que tengan pantalla, lo ideal es que tengan componentes específicos: papel, tela o vidrio matizado. Además, para dar luz al ambiente podemos añadir algunos apliques con luz indirecta. La cuestión es permitir el desplazamiento sin tropiezos y sin forzar la vista.

En otro sentido, podemos utilizar luces funcionales cuando queremos leer, estudiar, vestirnos y maquillarnos. Lo más habitual son las lámparas de lectura o bombillas empotradas para los armarios. Debemos buscar productos de luminaria neutra y que puedan disponerse sin obstruir los espejos.

¿Dónde colocar los puntos de luz en una habitación?

Según la actividad a realizar, podemos identificar ciertos tipos de combinaciones luminosas. Por ejemplo:

• Luz en tonos fríos para leer en la cama.

• Iluminación en los armarios y espejos.

• Artefactos para ambientar las zonas de televisión o relajación.

La idea principal es que se trate de una luminaria tenue y regulable. Asimismo, no olvidemos generar un buen clímax con lámparas en los techos y cerca de las cabeceras de las camas.

¿Cuántos focos debe tener un dormitorio?

Sabemos que, en muchos casos, la cantidad no es igual a la calidad. Por eso, colocar un mínimo de 2 o 3 artefactos de luminaria será suficiente para una habitación pequeña o mediana. Si disponemos de un ambiente más amplio, ya se puede aumentar la cantidad a 5 focos de luz.

De todos modos, lo importante siempre será la funcionalidad y no la cantidad.

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